En el vídeo que acompaña a este artículo, se puede ver una de las investigaciones más tensas del youtuber Melias, quien se desplazó hasta la ciudad de Huesca para confrontar a un hombre que llevaba tiempo acosando a una menor a través de las redes sociales. El caso ha generado una fuerte indignación, no solo por la diferencia de edad, sino por el perfil del acusado: un hombre de casi 40 años que actualmente estudia para ingresar en la Guardia Civil.

Un viejo conocido de la familia

Lo que hace este caso especialmente perturbador es que el acosador no era un desconocido de internet. Según relata la investigación, el sujeto había sido el profesor de esquí de la víctima cuando esta tenía apenas 9 años.

La historia revela una obsesión sostenida en el tiempo: el hombre intentó inicialmente mantener una relación con la madre de la menor y, tras ser rechazado, años más tarde redirigió sus intenciones hacia la hija. Aprovechando esa confianza previa de “instructor-alumna”, comenzó a responder a sus historias de Instagram para entablar conversación.

Las pruebas: “Si tu madre se entera, me corta los huevos”

Durante el reportaje, se muestran capturas de pantalla de las conversaciones que evidencian que el hombre era plenamente consciente de la ilegalidad y la inmoralidad de sus actos. A pesar de que la niña le reiteró en varias ocasiones que tenía 13 años, él continuó con insinuaciones de índole sexual y romántica.

Entre los mensajes más graves expuestos en el vídeo destacan:

  • Conciencia del delito: Frases explícitas donde admite que lo que hace está mal y teme la reacción de la familia.
  • Insinuaciones sexuales: Comentarios sobre el físico de la menor (llamándola “pivonazo”) e incluso la sugerencia de comprarle ropa interior o pijamas de una conocida marca de lencería femenina.
  • La gran contradicción: Al ser preguntado por su ocupación, el sujeto confesó estar opositando para el cuerpo de la Guardia Civil, cuya misión es precisamente proteger a la ciudadanía de este tipo de abusos.

La confrontación bajo la lluvia

Melias, tras coordinarse con la víctima (quien colaboró para detener al sujeto sin llegar a tener contacto físico con él) y con un equipo de seguridad, interceptó al hombre en el punto de encuentro pactado en Huesca.

En el tenso cara a cara que se observa en las imágenes, el hombre de 37 años termina admitiendo los hechos. Aunque inicialmente intentó justificarse diciendo que solo quería “dar una vuelta” y “hablar”, la presión de las pruebas mostradas por el equipo de Melias desmontó sus excusas.

El youtuber confrontó duramente la hipocresía del sujeto: “Reza para que esta chica no te denuncie, porque lo que tienes aquí es para meterte en prisión”, le espetó, recordándole que alguien con esa conducta no está capacitado para portar un uniforme de las fuerzas de seguridad.

Desenlace

El vídeo concluye con el sujeto marchándose visiblemente afectado y avergonzado tras ser obligado a confesar la situación a un amigo por teléfono. Se confirma además que la familia de la menor ha sido informada para proceder con las denuncias pertinentes.

Este caso sirve como un potente recordatorio de que el peligro para los menores no siempre proviene de perfiles anónimos, sino que a veces se esconde en figuras de autoridad o confianza cercanas a su entorno.


Os dejamos por aquí el video completo que podéis encontrar en el canal de Elias