La empresa Servinabar 2000 ha pasado de ser una compañía prácticamente desconocida para el gran público a convertirse en protagonista involuntaria de las redes sociales y plataformas de reseñas. Tras las recientes informaciones que la sitúan en el epicentro de las investigaciones de la Unidad Central Operativa (UCO) sobre el denominado ‘caso Koldo’, los usuarios han inundado su perfil digital con comentarios mordaces y burlas.
La atención mediática se disparó tras conocerse los informes policiales que apuntan a una presunta copropiedad de la empresa por parte de figuras destacadas del ámbito político, concretamente vinculadas a la antigua secretaría de Organización del PSOE. Según la investigación, existirían documentos que acreditan la adquisición de participaciones de la compañía en el año 2016, una conexión que los implicados han negado.

“Chorizos a la sidra” y nuevas “ubicaciones”
La reacción de internet no se ha hecho esperar. Lejos de limitarse a la indignación política, los internautas han optado por el humor ácido, utilizando las reseñas de Google como tablón de anuncios. El perfil de la empresa ha recibido multitud de valoraciones irónicas que mezclan servicios ficticios con referencias directas a la situación judicial de los investigados.
Entre los comentarios más compartidos se encuentran frases como “Buen sitio para empolvarse la nariz”, alusiones a supuestas “invitaciones a señoritas” o preguntas sarcásticas sobre si la empresa dispone de “fontaneras”, en clara referencia a la jerga utilizada en las tramas de corrupción.
Otros usuarios han ido más allá, modificando imaginariamente la ubicación de la sede social de la empresa. “La dirección está sin actualizar, se ha trasladado a Soto del Real”, reza una de las reseñas, mientras que otra recomienda los “chorizos a la sidra”, apuntando cínicamente que “ahora el local está en Soto del Real”.
El contexto judicial
Este estallido de burlas coincide con momentos decisivos en la instrucción del caso. La figura de Santos Cerdán, ex número tres del partido socialista, ha vuelto a la primera plana tras decretarse su libertad provisional. Cabe recordar que el político permanecía en prisión preventiva desde finales de junio ante el riesgo de destrucción de pruebas.
La decisión del Tribunal Supremo de modificar su situación procesal, al considerar que dicho riesgo ha disminuido, ha reavivado el debate público y, como efecto colateral, ha dirigido la mirada —y el escarnio digital— hacia las empresas que, como Servinabar, aparecen señaladas en el sumario de la causa.