Madrid, 23 de noviembre de 2025. – Varios centenares de ciudadanos se han concentrado este domingo a las puertas del Tribunal Supremo, en la Plaza de la Villa de París de Madrid, para expresar su rechazo frontal a la reciente sentencia condenatoria contra el Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz. Bajo consignas como “golpistas con toga”, “vergüenza” y “esto es política, no justicia”, los manifestantes han denunciado lo que consideran una maniobra de lawfare o guerra judicial destinada a desestabilizar las instituciones democráticas.

La protesta, convocada a través de redes sociales y aplicaciones de mensajería por colectivos sociales y ciudadanos “sin siglas ni banderas”, responde al fallo adelantado el pasado jueves por la Sala de lo Penal del Alto Tribunal. Dicho fallo condena a García Ortiz a dos años de inhabilitación para el ejercicio de cargo público y a una multa, al considerarlo autor de un delito de revelación de secretos en relación con la difusión de datos reservados sobre un procedimiento fiscal.

Indignación ciudadana y apoyo institucional

El ambiente frente a la sede judicial ha estado marcado por la indignación. Los asistentes, que portaban carteles en defensa de la democracia y contra la “justicia antidemocrática”, han escuchado la lectura de un manifiesto a cargo de portavoces ciudadanos. En el texto se ha calificado la actuación del Supremo de tener una “clara intención política” y de no haber respetado la presunción de inocencia del máximo responsable del Ministerio Fiscal, criticando especialmente que el fallo se anunciara antes de hacerse públicos los argumentos jurídicos completos de la sentencia.

La movilización en la capital no ha sido un hecho aislado; en Santiago de Compostela también se ha registrado una concentración de apoyo en la que medio millar de personas han coreado lemas similares, advirtiendo contra un “golpe de Estado judicial”.

Delgado y Garzón encabezan el respaldo

Uno de los puntos de mayor atención mediática de la jornada ha sido la asistencia de figuras prominentes del ámbito jurídico y político. La exministra de Justicia y actual Fiscal de Sala de Memoria Democrática, Dolores Delgado, y el exmagistrado de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, han hecho acto de presencia para mostrar su solidaridad con García Ortiz.

Garzón, quien fue inhabilitado por el mismo tribunal en 2012, se ha mostrado especialmente crítico ante los medios. Ha calificado la condena de “injusta”, “arbitraria” y propia de una persecución política más que jurídica. El exjuez ha lamentado la “revictimización” que supone para el Fiscal General el adelanto del fallo sin la sentencia motivada, asegurando que este tipo de actuaciones generan “desasosiego” en la ciudadanía y minan la confianza en el sistema democrático.

La sentencia, que conlleva la salida de García Ortiz de la carrera fiscal, marca un hito sin precedentes en la historia judicial de España, al ser la primera vez que un Fiscal General del Estado es condenado por el Tribunal Supremo en el ejercicio de su cargo.