Un solemne funeral de Estado en la capital contrasta con la indignación y el dolor vivo en pueblos como Paiporta, que un año después siguen pidiendo responsabilidades.
VALENCIA, 29 de octubre de 2025
España conmemora este miércoles el primer aniversario de la trágica DANA que el 29 de octubre de 2024 devastó la provincia de Valencia, dejando un rastro de destrucción y una cifra de víctimas que conmocionó al país. La jornada está marcada por una dualidad palpable: el luto oficial y solemne que se vive en la capital, y la rabia contenida que aún persiste en las zonas cero, donde los vecinos sienten que muchas muertes pudieron evitarse.

🏛️ Un solemne funeral de Estado
El acto central de la jornada es el funeral de Estado que se celebra esta mañana en Valencia en memoria de las víctimas. Según la cobertura en directo de El Confidencial, al acto asisten las más altas instituciones del Estado, incluyendo Sus Majestades los Reyes y el presidente del Gobierno.
El evento busca ser un homenaje solemne y un símbolo de unidad nacional frente a la catástrofe. Las intervenciones de las autoridades se centran en el recuerdo a los fallecidos, el agradecimiento a los servicios de emergencia y el compromiso con la reconstrucción total de las áreas afectadas.

🗣️ La herida abierta de Paiporta: “No perdonamos las muertes”
Este relato de unidad y recuerdo contrasta fuertemente con la realidad que se vive en municipios como Paiporta, uno de los más golpeados por la riada. Un reportaje de RTVE titulado “Año 1: La riada pudo ser inevitable, pero no perdonamos las muertes” pone voz al sentir de los supervivientes.
Un año después, el dolor en Paiporta no ha cicatrizado y se mezcla con la indignación. Los vecinos entrevistados por la cadena pública insisten en que, si bien el fenómeno meteorológico fue extremo e “inevitable”, la magnitud de la tragedia humana no lo fue. Las críticas apuntan directamente a la falta de avisos efectivos a la población, a la gestión de las infraestructuras hidráulicas y a una respuesta que consideran tardía.

La sensación generalizada en estas localidades no es solo de tristeza, sino de enfado por una supuesta negligencia que, en su opinión, convirtió una inundación en una catástrofe mortal.
⚖️ Un año de reconstrucción y debate político
El aniversario llega tras doce meses de enorme complejidad. Como analizaba El Mundo en su edición de ayer, el último año ha estado marcado por la lenta y burocrática reconstrucción y por un agrio debate político.
Mientras las familias lidiaban con el barro, las aseguradoras y la pérdida de sus hogares, la gestión de las ayudas y la depuración de responsabilidades políticas han sido un foco constante de tensión. Este aniversario no solo sirve para recordar a los que se fueron, sino también para evidenciar que las zonas afectadas siguen exigiendo justicia y medidas efectivas para que una tragedia de tal calibre no vuelva a repetirse.
Así, Valencia afronta este primer aniversario con el corazón dividido: entre la necesidad de un duelo oficial y la exigencia de que el luto se acompañe de respuestas.
