El partido destaca la importancia del sector primario para la soberanía alimentaria y critica duramente las políticas europeas y la gestión de la fauna salvaje.

Arroyo de la Fragua. – La formación política VOX ha organizado un desayuno de prensa en Arroyo de la Fragua para reiterar su firme compromiso con la defensa del campo español. Durante el acto, el partido subrayó el valor estratégico que el sector agrario y ganadero representa no solo para la economía nacional, sino también para la soberanía alimentaria y la preservación de la identidad rural del país.

Bajo la premisa de que “sin agricultores, ganaderos y pescadores no hay nación que se sostenga”, los representantes de VOX exigieron un cambio de rumbo en las políticas, tanto nacionales como europeas, que actualmente afectan al mundo rural.

Críticas a la Proliferación de Parques Fotovoltaicos

Uno de los puntos centrales de la denuncia fue la expansión de parques fotovoltaicos sobre terrenos de cultivo fértiles. El partido señaló con preocupación la situación en provincias andaluzas, como Jaén o Granada, donde, según afirman, se están talando miles de olivos centenarios para dar paso a la instalación de placas solares.

La Gestión del Lobo, en el Punto de Mira

VOX también abordó la problemática de la fauna salvaje, exigiendo un Plan Nacional del Lobo. El partido denuncia que la inclusión del lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESPRE) ha provocado un aumento de los ataques al ganado, generando pérdidas millonarias para los ganaderos.

La formación propone tres medidas concretas:

  • Excluir al lobo de dicho listado.
  • Establecer un sistema de indemnizaciones ágiles y adecuadas para los afectados.
  • Permitir el control poblacional de la especie en las zonas donde se registren daños reiterados.

“No puede primar la protección del lobo sobre la supervivencia del ganadero”, sentenció el partido.

Burocracia y Política Agraria Común (PAC)

En el ámbito europeo, VOX criticó duramente la Política Agraria Común (PAC). Denunciaron el exceso de burocracia y las estrictas condiciones medioambientales impuestas desde Bruselas, las cuales, según el partido, “ahogan al agricultor con trámites y reducen la rentabilidad del campo español”.

El partido concluyó reafirmando que el campo es un pilar cultural, social y territorial, y su defensa es clave para luchar contra la despoblación. Apostaron por políticas que impulsen la modernización del sector, reduzcan la carga burocrática y garanticen precios justos para los productores.