MADRID. — Los dispositivos móviles incautados en la trama del ‘caso Koldo’ continúan arrojando luz sobre las maniobras políticas detrás de los rescates empresariales durante la pandemia. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha localizado una serie de mensajes en el teléfono de Koldo García que apuntan a la intervención directa del expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en las negociaciones para el rescate de la aerolínea Plus Ultra.
Según se desprende de las diligencias policiales, las conversaciones, fechadas en septiembre de 2020, indican que Zapatero habría mantenido reuniones al más alto nivel con miembros del Gobierno y de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en momentos críticos para la aprobación de las ayudas públicas.
La “cumbre” del 7 de septiembre
El punto neurálgico de estas revelaciones se sitúa el 7 de septiembre de 2020. En un intercambio de mensajes interceptado por los investigadores, el entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos, informó a su asesor, Koldo García, de un movimiento estratégico: «Está Zapatero reunido ahora mismo con el ministro de Inclusión y Seguridad Social en el Ministerio de Trabajo». Ábalos añadió un escueto «Para que lo sepas».
La respuesta de Koldo García no tardó en llegar, aportando un dato clave que elevaba el perfil del encuentro: «Me ha dicho Bartolomé que estaría esta mañana». La referencia alude a Bartolomé Lora, quien en ese momento presidía la SEPI, el organismo encargado de validar y otorgar los fondos de rescate a empresas estratégicas.
Esta información no se quedó en el círculo del Ministerio de Transportes. Koldo García realizó una captura de pantalla de esta conversación y se la envió a Víctor de Aldama, el empresario y presunto conseguidor de la trama, quien tenía intereses directos en el éxito de estas operaciones debido a sus vínculos con el gobierno venezolano y la aerolínea.
Versiones contradictorias
El objetivo de estas supuestas reuniones habría sido “desencallar” el rescate de Plus Ultra, que finalmente recibiría una inyección de 53 millones de euros en marzo de 2021. Sin embargo, las informaciones extraídas de los móviles chocan frontalmente con la versión oficial.
Fuentes cercanas al entonces ministro de Inclusión, José Luis Escrivá, han negado categóricamente a los medios que dicha reunión tuviera lugar. Asimismo, aseguran que Escrivá no conoce a Bartolomé Lora y recuerdan que las competencias sobre el rescate de la aerolínea no recaían bajo su ministerio.
A pesar de las negativas, ex altos cargos de la SEPI consultados durante la investigación han señalado que la presión por parte de Transportes era constante. Describen a Ábalos como el «principal embajador» de Víctor de Aldama, encargado de contactar con distintos ministerios para facilitar reuniones y agilizar trámites.

La batalla por los teléfonos y la vía judicial
Estas revelaciones surgen en un contexto en el que tanto Koldo García como José Luis Ábalos, actualmente en prisión provisional en Soto del Real, han solicitado de forma reiterada la devolución de sus terminales móviles. La defensa de García argumenta la necesidad de los dispositivos para su defensa legal en otros litigios, aunque el Tribunal Supremo ha denegado la petición mientras la UCO finaliza el volcado y análisis de la ingente cantidad de datos que contienen.
Paralelamente, la investigación ha abierto una nueva vía centrada en el rastro del dinero. La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) investiga si hubo un uso fraudulento de los fondos públicos otorgados. Recientemente, las autoridades han puesto el foco en Julio Martínez Martínez, un empresario cercano a Zapatero y cliente de la agencia de comunicación dirigida por las hijas del expresidente.
Martínez fue detenido y puesto en libertad con cargos tras registrarse movimientos de capital sospechosos entre sus sociedades y la trama, lo que ha llevado al Juzgado de Instrucción número 15 de Madrid a investigar un presunto delito de blanqueo de capitales relacionado con el dinero del rescate.